No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas (Karma I)

FICHA TÉCNICA

Título: No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas

Autor: Lara Norton

Editorial: Espasa

Nº páginas: 352 págs

Encuadernación: Tapa blanda

ISBN: 9788467041583

Género: Humor

ARGUMENTO Y OPINIÓN

A pesar de que lleva 2 años publicado, mejor leerlo tarde que nunca. Estoy muy arrepentido de no haberlo leído antes pero muy feliz de haberlo hecho ahora y todo ha sido gracias a la película (que aún no la he visto) dirigida por María Ripoll. Hablo de No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas de Laura Norton.

Laura nos presenta a la pobre Sara, una chica madrileña con menos suerte que un calcetín sin pareja. Deja sus estudios para adueñarse del antiguo taller de plumas de su abuela y se va a vivir al piso colindante al negocio. Pero ese piso, parecerá una patera porque allí se mete su padre depresivo tras la ruptura con su mujer (un montón de años de matrimonio), su hermana rebelde, su novio arquitecto, un nórdico y el prometido de la hermana (que tiene tela quien es). Una locura formada en ese piso con la que Sara deberá vivir día tras día ¿Tendrá una vida cuerda nuestra protagonista?

Tras acabar esta novela, una gran sonrisa se me colocó en las comisuras de los labios. No me la esperaba tan ideal, tan perfecta para los momentos más agobiados de la universidad. Un respiro leer las ocurrencias de Sara y por ello estaré eternamente agradecido a Laura Norton, pero como casi siempre me pasa (al igual que con Candela Ríos) este es un pseudónimo y deseo saber con ansias quien se esconde detrás de este sobrenombre. Debo agradecer a Espasa por cederme un ejemplar.

Cuando las cosas las meditas mucho y quieres que te salgan bien, te van a salir estrepitosamente mal. Esto es lo que a Sara le ocurre ¿Cómo definir a Sara? Una persona que se hace querer y muy organizada (aunque le sirve de poco). Aunque me ha fascinado su personalidad, yo soy de los que piensa que lo mejor es improvisar; te lo pasarás mejor y dejarás de darle vueltas a la cabeza a cosas innecesarias.

Sé que empezar un nuevo proyecto empresarial es difícil, pero Sara lo tiene más que claro quiere ser plumista como su abuela. Poner este tipo de negocios en época de crisis es una aventura que traerá más de un quebradero de cabeza a nuestra chica. Veo súper interesante como la autora se ha formado en el mundo de la moda, y no se me ha hecho nada pesado las partes en las que hay un vocabulario más técnico. 

Respecto a los personajes que se acoplan en el piso de la madrileña son tan dispares pero a la vez tan necesarios. Lucía es la hermana pequeña, un pelín niñata y cabezota, será la primera en llegar pero no lo hará sola. Con ella vendrá Aarón (¡bendito sea!) su prometido, dispuesto a montar una boda en microsegundos, pero es flipante como la autora tergiversa este personaje entre las dos hermanas. Poco después vendrá el padre de ellas, muy triste tras separarse de la mujer de su vida. Y no olvidar el novio de Sara que vendrá de París a visitarla y se le añade un noruego, con el que te tronchas de la risa. ¡Vaya show!

Pues este show que parece un sinsentido, me ha hecho reír tanto que casi me duele la boca de tenerla tan abierta. La autora escribe tan fluidamente que hace que te leas el libro en una sentada. Como pega puedo poner algunos deslices, los cuales mi ojo avizor ha analizado. Un ejemplo sería que Sara en un capítulo dice que odia la manzanilla y en otro dice que le gusta esta infusión ¿Te gusta o no? Es una gilipollez pero al verme dado cuenta pues lo pongo jaja.

No olvidarme que seguiré leyendo a Laura Norton, porque es que me ha fascinado como escribe y he leído la sinopsis de su otro libro a la venta, y lo tengo que leer sí o sí. Pero me he quedado a cuadros cuando he visto que mañana Espasa publica la segunda parte del que hoy reseño y se titula Ante todo, mucho karma ¡Qué ganas de leerlo!

En conclusión, no culpes al karma… es una novela perfecta para los momentos de bajón, que te sacarán una sonrisa muy fácilmente y difícil de olvidar. Una novela digna de admirar

VALORACIÓN

4,75/5