Cuando la amistad me acompañó a casa

FICHA TÉCNICA

Título: Cuando la amistad me acompañó a casa

Autor: Paul Griffin

Editorial: DNX

Nº páginas: 255 págs

ISBN: 9788494595523

Género: Juvenil

ARGUMENTO Y OPINIÓN

No soy yo el más forofo del mundo animal, pero a veces apetecen historias donde las mascotas tienen su protagonismo en la trama y juegan un papel muy importante en la vida del humano. Mucha gente dice que los animales son más honrados que los humanos y a pesar de que no soy fan de ellos, tengo que dar la razón por lo que me ha hecho ver este libro. Os traigo la reseña de Cuando la amistad me acompañó a casa de Paul Griffin.

En esta historia contamos con un protagonista muy joven y con una trayectoria en la vida bastante dura, Ben Coffin. Este chaval de 12 años ha estado en varios centros de acogida y es adoptado por Tess, una psicologopeda. Le hacen bullying en el colegio y para aislarse de todos sus problemas, lee muchísimos libros para escaparse de ellos. Yendo a la biblioteca, se encuentra a un perrito, que bautizará como Flip, que será ese alivio para todo el dolor que tiene que soportar y le traerá mil y una cosas a su vida. ¿Será Flip el antídoto a la mala suerte que ha corrido este chico en su vida?

Nos encontramos con una novela juvenil que trata una multitud de temas que me han gustado y me parecen muy acertados para dar a los más jóvenes de la casa. Yo lo recomendaría para niños a partir de la edad de Ben, 12 años; aunque no hay que acotar la edad porque puede aportarte algo a ti también. Agradezco a la editorial DNX el ejemplar para hacer posible dicha opinión.

Esta novela nos presenta una trama bastante dura y con muchos giros tanto positivos como negativos en la vida del protagonista. El libro comienza con una situación de acoso escolar hacia Ben Coffin y desde ese momento podremos ver que su vida, fácil no es. Ha estado en varios orfanatos y tras un suceso que nos detallará, fue adoptado por una psicologopeda llamada Tess de 67 años. Ella perdió a su esposa y necesitaba compañía, y que mejor que al chico que ha ayudado tanto en el centro de acogida. 

Ben siente una pena tremenda por todo lo que le rodea, ya que su situación en la escuela no es la ideal y todo el pasado que ha vivido le tiene trastocado. Por ello se refugia en el mundo de la literatura, concretamente en esos de fantasía y ciencia ficción, alejados de la realidad más cercana. Aunque caerá en sus manos un ejemplar de Plumas de Jacqueline Woodson (libro que existe en la realidad), una novela muy realista que hará conocer a Halley, la hija de la bibliotecaria, la cual lucha con una terrible enfermedad. 

De camino a la biblioteca se encontrará con un perrito que será un regalo divino para facilitarle esa felicidad que añora. Le bautizará como Flip. Junto a Halley, Ben hará dos cosas importantes que le ayudarán una barbaridad y él no sabe que también está arrimando el hombro a mucha gente. Una de esas actividades que realizará junto a Halley es formar a Flip para que sea perrito terapéutico en el programa “Léele a Rufus”, el cual consiste en ayudar a los niños que tengan mejor dicción lectora y con trucos que Flip sabrá, animará a los más pequeños a poder leer a la perfección. La otra actividad que harán es escribir una novela juntos de ciencia ficción. Es uno de los puntos que no me han gustado del libro, ya que se empeñan mucho en describir cosas de su proyecto conjunto (que sí, que dicta cosas de la vida de ellos y es como el reflejo bonito de la de ellos), me aturdía de unas maneras indescriptibles, tanto era eso que lo tenía que dejar para retomarlo más tarde.

El libro comienza lentísimo y cuesta en arrancar una barbaridad (tanto que piensas en abandonarlo), pero cuando ya conoces a Ben en profundidad, lo querrás proteger y no dejarlo escapar. Se merece lo mejor y querrás acompañarlo para ver si su camino no se vuelve a torcer. Griffin ha diseñado unos muy buenos personajes y empatizas, cosa que es muy importante para disfrutar de la lectura. Hay giros argumentales que no te los esperas y el desenlace me ha dejado una calidez tremenda. En este libro hay mucha calidad humana y canina.

Además existen una multitud de personajes que dan más credibilidad a la historia como los señores Lorentz, Jeanie, Rayburn… Todos tienen su papel en la historia y no se ha de perder el ojo con ellos.

Me ha gustado muchísimo la inclusión de contenido LGTB, el trato hacia las enfermedades, la compañía animal, el bullying, la amistad, el amor… temas que no se alejan de nuestra realidad más cercana y que la población más joven, necesita conocer. Además, tiene un toque de magia, que siempre hace falta en la vida real. 

No conocía al autor y me ha agradado su forma de escribir, pero debe mejorar los comienzos de las novelas para que enganche desde la primera página. No es un libro que te vuelvas adicto, pero se lee fácil y rápido. Se agradece los capítulos tan cortos y la jerga tan cotidiana. 

En fin, Cuando la amistad me acompañó a casa es una novela juvenil que puede parecer muy inocente, pero tiene una dosis de realidad necesaria para hacernos bajar de las nubes. Los personajes están muy perfilados y quiero que traigan más novelas de este estilo, porque me llegan a lo más hondo del pecho, el corazón.

VALORACIÓN

3'5/5